lunes, 14 de febrero de 2011

¿Ofrecen las asociaciones juveniles factores de protección y/o riesgo?

En la actualidad todos conocemos cómo las asociaciones juveniles han ido proliferando notablemente. 
El objetivo inicial de cualquier asociación es crear un punto de encuentro para interaccionar con otras personas con las que compartimos aficiones, actividades, deportes o hobbies. Existen asociaciones de todo tipo: social, religioso, deportivo, cultural etc. El clima que se crea propia momentos de esparcimiento, donde en ocasiones es común compartirlo en base a hábitos o rituales propios de las asociaciones: comidas de celebraciones, vinos de honor, almuerzos actividades que fomentan el conocimiento y  la interacción entre sus miembros. 

Pero, no en  todas las comidas, almuerzos, cenas o celebraciones el ambiente fomenta estilos de vida saludables. Hay ocasiones en los que se permiten excesos de alcohol y /o otras sustancias. Pensar en un fallero con un cubata en la mano cantando y bailando no es la imagen más común en una asociación cultural como las fallas, pero sí es una realidad. Pensar en una peña de pueblo donde la principal fuente de ingresos es el barracón de las fiestas, donde se  bebe y vende alcohol, es a nuestro pesar, una realidad. 

Esa es la cara que más nos preocupa y debe ser una minoría, pero todos somos responsables que esto no suceda. Debemos fomentar y potenciar los motivos por los que las asociaciones juveniles fueron creadas,  que los jóvenes sigan creando, innovando, buscando y participando activamente en nuestra sociedad.


3 comentarios:

  1. En el ambiente de las fallas el alcohol es un acompañante histórico , cuanto hemos cogido nuestras primeras borracheras en esas fechas y casi con el consentimiento de los mayores que están en la mayoría de los casos en pero estado q nosotros. como me van a censurar estos a mi cuando ellos se ponen hasta el .... de todo. Además en casi todos los casales la venta de alcohol es uno de los ingresos con los q se cuenta.
    En fin q el alcohol en estas fiestas es tanto problema de jovenes como de adultos

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  2. Pienso que el problema en estos casos es sobretodo cultural y de educación, no quiero personalizarlo en las fallas ya que creo que se puede extrapolar a cualquier festejo popular. Pero si que es cierto que durante esas fechas, parece que todo vale , que hay una especie de bula popular donde el beber no es solo consecuencia de la fiesta sino que es obligatorio beber para participar de la misma. Y comparto con el comentario anterior que es muy difícil hacerle comprender a un adolescente que el uso que esta haciendo del alcohol no es el correcto cuando todos los adultos van aun peor que ellos. Es más con que argumento queremos prohibir el botellón cuando en estas fechas el consumir en las vías públicas es algo totalmente normalizado.

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  3. Esto ya parece un fascismo puro y duro. Van a acabar restringiendo mi derecho a divertirme como me de la gana y dónde me de la gana. si soy miembro de una peña, una falla, o lo que sea no es por mi amor al arte torero o fallero precisamente, sino por la fiesta. Ni que hayamos inventado la rueda..

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